22 enero, 2025
Luis Carlos creció en el seno de una familia amorosa, conformada por su madre, Lucrecia Torres, y los pilares adicionales que encontró en su tía Madeleine y Luis Eduardo Amaya, la expareja de su madre, quienes lo apoyaron incondicionalmente.
Su pasión por estudiar Derecho floreció en las aulas de la Institución Educativa Juan de Cabrera, pero las limitaciones económicas siempre pusieron un signo de interrogación sobre su futuro académico.
La luz llegó en forma de una beca ofrecida por la Fundación Medilaser. Con determinación y buenos resultados en las pruebas ICFES, Luis Carlos aplicó al programa y se convirtió en beneficiario. En enero de 2018 inició su proceso en la Fundación Universitaria Navarra (Uninavarra), marcando el inicio de un camino lleno de retos y aprendizajes.
“Todos pensaron que adaptarse a una universidad privada sería difícil, pero con disciplina, empatía y amistad logré construir lazos que me acompañaron durante toda la carrera”, recuerda con nostalgia.
Ejemplar
Luis Carlos mantuvo un promedio académico sobresaliente. Su dedicación no solo le permitió cumplir con las exigencias académicas, sino también soñar más alto.
“A doña Miriam, presidenta de la Fundación Medilaser, y a doña Nohora, quiero agradecerles infinitamente por ese acto de generosidad que tienen conmigo y con todos los jóvenes que hemos sido beneficiados de la beca. Nos han dado la posibilidad de surgir, de prepararnos profesional y personalmente”.
Durante su paso por Uninavarra, combinó sus estudios con un empleo como mesero en el restaurante El Zoológico. Allí aprendió lecciones de vida y esfuerzo que marcarían su carácter.
En el noveno semestre, su vida dio un giro significativo cuando una vacante en el área Jurídica de Clínica Medilaser fue socializada en su universidad. A pesar de no tener experiencia, decidió postularse. Así, en 2022, inició su carrera profesional como asistente. “Mi equipo de trabajo es ahora mi nueva familia. Estoy eternamente agradecido por lo mucho que he aprendido junto a ellos”.
Sueños
Hoy, Luis Carlos vive en el norte de Neiva, en el barrio Rojas Trujillo, junto a su esposa, Stefania Quesada y su hijo de dos años, Martín.
“La beca fue una oportunidad única en la vida. Sin ella, muy posiblemente no hubiera podido estudiar. Esto me permitió tener un gran proyecto de vida”.
Luis Carlos Castañeda Torres es el testimonio vivo de que la educación transforma vidas. Y que, con esfuerzo y apoyo, los sueños pueden convertirse en realidad.
Recuadro
Fundación Medilaser ha otorgado cerca de 80 becas a jóvenes con total compromiso de cursar los diferentes programas que ofrece la Fundación Universitaria Navarra, Uninavarra.
Los beneficiados son jóvenes, hijos de trabajadores de la Clínica Medilaser, trabajadores de la Clínica Medilaser y jóvenes de la comunidad.